jueves, 25 de julio de 2013

Con mi odio enamorado...

Sabía que la única herida sería yo ... me siento pésimo. Todas las palabras eternizadas en un papel se van a borrar con toda la rabia que saldrá de mis ojos. Soy idiota y patéticamente ingenua. Me detesto y lo peor que el tercero es indiferente y ni siquiera habrá una disculpa silenciosa. No quería que se terminara pero los argumentos terminaron de envenenar mi cabeza y mi corazón paso de estar doblado a sentirse patético. De todas formas, siempre lo he sido! Maldigo el día en que dejé de quererme para querer a personas despreciables. Mi dignidad se fue a la mierda, otra vez.

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