jueves, 14 de abril de 2011

Señora Envidia


Usted, señora envidia, que me mira con sus ojos esquivos,
usted señorita envidia que me alienta cada vez que una de sus palabras hirientes salen de su boca sólo para traicionarme,
usted joven envidia que me alborota cada vez que se refiere a mi, cada vez que intenta ser como yo,
usted que no tiene vida, usted que desea mis amigos, que quisiera mis desmedros, usted que viste como yo, usted que sufre envidiando al resto.
No siga diciendo que el mundo no tiene puertas, que el sol no alumbra su ventana,
no siga mintiendo para ser querida, no siga esforzándose por ser diferente sólo para poder encajar.
Usted, señora envidia, no siga rogándole al mundo que le obsequie un compañero, un vicio para parecer interesante, una boca bonita pero con lengua venenosa, usted señorita envidia que está tan cerca de mi hágame el favor de tomar su abrigo y disponerse a salir de mi vida.

sábado, 9 de abril de 2011

Dime


Dime, ¿por qué hoy no estás frente a mi?
Debo confesar que A veces anhelo tu reflejo sobre mi sombra,
Tus labios rosando algún rincón de mi piel,
Tu apetito de palabras buscando consuelo en mi calma
Puedo leer en tus ojos que me has necesitado en un día apagado,
Que tu cuerpo extraña la sensatez de mis sueños
Así como yo he necesitado la protección
de alguno de tus abrazos encarcelados en mi retina.
Qué importa que yo me pierda de vez en cuando en el pasado,
Lo que pasa es que confesando culpas debo admitir
Que a veces me olvido que ya he olvidado.